La exposición "Arte Salvado", que aún acampa en el bulevar central del Paseo del Prado, continuará el día 21 de marzo su periplo por la geografía española, tal y como lo hicieran las obras del Tesoro español de 1936 a 39, recalando en Valencia, Barcelona y Figueras. Con esta muestra, la Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales, ha querido agradecer la labor de protección y salvamento que durante la Guerra Civil española llevó a cabo tanto el gobierno de la República como, desde febrero de 1939, el Comité Internacional para el Salvamento de los Tesoros de Arte Españoles.
La exposición recoge el difícil traslado que sufrieron las obras del Museo del Prado, la Academia de San Fernando, la Biblioteca Nacional o el Palacio Real desde que, tras otros atentados contra el patrimonio artístico español, el 16 de noviembre de 1936 el Prado fuera bombardeado (se dice que por error) por aviones del bando nacionalista; fue entonces cuando se decidió que las obras siguieran el mismo camino que el gobierno republicano y fueran llevadas a Valencia en las mismas cajas de embalar que se pueden contemplar en el espacio expositivo.
Rodeado de esas mismas cajas, el visitante se ve inmerso en el ambiente de guerra que acompañó el viaje de las obras: de Madrid a las Torres de Serranos y el colegio del Patriarca de Valencia, donde permanecieron hasta que en marzo de 1938 fueron trasladadas hasta Cataluña, y de ahí finalmente a Ginebra, previo paso por Francia, donde fueron expuestas hasta que en 1939 volvieron de nuevo a Madrid.
Gracias a los estudios de los últimos años que han dado lugar a la muestra, la labor republicana ha sido por fin reconocida y se han aclarado los ataques del bando franquista, que acusaban a los 'salvadores' de ladrones del Tesoro.
Más información sobre el traslado en el libro de Arturo Colorado Castelleray, Éxodo y Exilio del Arte y en la página web del Museo del Prado
Publicado el 5 de marzo de 2010 en:
Arteactualidad
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